Mercedes Salvadora Eva, nació en Mendoza el 15 de enero de 1948. Su familia estaba compuesta por María Faliti, su madre, Juan Vega, su padre, y sus hermanos Juan Carlos, Elina y Eduardo. Su nombre, Salvadora Eva, había sido escogido por su padre, quien era peronista y militante sindical de Agua y Energía.
«Mecha», como le decían, realizó sus estudios secundarios en el Colegio San Pedro Nolasco, donde se recibió de maestra. Luego comenzó a trabajar en la peluquería de su madre, ubicada en la cuarta sección. En 1968, cuando tenía veinte años, ingresó a la Facultad de Ciencias Médicas de la UNCuyo, donde en setiembre de 1974 obtuvo el título de Médica.
En la Facultad de Medicina conoció a Carlos Espeche (también médico), con quien se casó el 5 de febrero de 1972 y concibió dos hijos, Ernesto y Mariano. Sobre esto cuenta Ernesto: “En la Facultad de Medicina fue el ámbito, no sólo para que ellos tomaran contacto -se conocieran digamos- sino para que empezaran la militancia (en el PRT). La Facultad de Medicina tuvo como particularidad por lo que yo pude averiguar con testimonios, amigos de ellos, compañeros médicos que la militancia del PRT, particularmente, fue muy fuerte”.
Mercedes se desempeñó como médica en los hospitales Lencinas y Lagomaggiore. En 1974, la familia se mudó al barrio General Espejo, en Las Heras, donde se involucraron activamente con las problemáticas sociales y sanitarias de la zona. Ernesto cuenta: “Eran los médicos del centro de salud y vivíamos en la casa de al lado (…) De hecho ellos detectan que el principal problema de salud del barrio tenía que ver con la contaminación del agua; infecciones, hepatitis y algunas enfermedades asociadas al agua no purificada. Entonces logran el agua potable en el barrio.” El Centro de Salud, hoy lleva sus nombres.
En 1975 el matrimonio decidió distanciarse, como medida de seguridad. El 7 de junio de 1976 Mecha fue secuestrada en su domicilio de calle Ituzaingó de Ciudad, donde se encontraba con sus dos hijos. Carlos había iniciado, un año antes, un itinerario en la clandestinidad que lo llevó primero a Buenos Aires y luego a Tucumán, donde fue asesinado el 4 de abril de 1976 (identificado por el EAAF en noviembre de 2014).